29 junio, 2008

¡Tremendos Copionazos!

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De la página electrónica de "El Comercio", hoy 29 de Junio de 2008, con el detalle ampliado aquí abajo:
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Está bien que (1) la fama de mi cumpa haya traspasado fronteras, arribando hasta los propios confines del Yukon, mismo Sargento Preston, o que (2) "El Comercio" ande tan caín de titulares que ya no sepa qué copiar, pero esto de hurtarse el apodo acuñado por Jomiviur y endosárselo a un futbolista ya pasa de castaño oscuro.
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¡Me voy a quejar con el Pen Club, canejo!
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3 comentarios:

Anónimo dijo...

Oiga cumpa, a ver usted que esta por alla, dese una vuelta por el decano y pregunte, asi timidamente, como es ? porque algo se tendran que decir estos sinverguenzas de los Miro Quesada por los derechos de imagen y (mal)formacion. Usted mismo es! Ya de ahi le deja algo al buen Vic, a ver si se recupera un poco su semblante, que la ultima vez lo vi no era ni la sombra de lo que nunca fue. El resto lo destina al fondo pro elaboracion del bestiario chinchano.

Anónimo dijo...

Oiga Metronomo,
No solo es El Comercio, vea esto esto en Sport (diario deportivo catalan) sino mire esto: http://www.sport.es/default.asp?idpublicacio_PK=44&idioma=CAS&idnoticia_PK=522756&idseccio_PK=803

Cumpa, no hay que perder tiempo, pasele el encargo ya mismo a nuestro agregado cultural en Barcelona y con las instrucciones del caso, y si es necesario tendra que viajar para alla para tomar "al toro por las astas", usted mismo es.

Anónimo dijo...

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De verdad que sí, cumpa, que ya ni en los apellidazos limeños se puede confiar, oiga Ud., como ya contara el genial Ribeyro en su celebrada "El Marqués & Los Gavilanes". Ni las doce generaciones de los Miró ni las catorce de los Quesada lavan este copionesco baldón que es -encima- refrito de diario catalán, como Ud. mismo evidencia. Me encargaré de darme una vuelta por Barcelona para la vindicación correspondiente y de pasarella, comerme un arrocito en Castelló, como mínimo.

Y no se preocupe por el Bestiario. Ahí estoy empezando a armar el esquema y desde ya le prometo un capítulo entero, en el que se narrará las cuitas que aconteciéronle cuando Ud. gigoleaba en la provincia a sus anchas (naturalmente) en la Mazda color mazamorra de La Esperanza. ¡Qué bonito era cuando Ud. era como Ud. mismo era, cumpa!

Dios guarde a Ud.

Su Q-mpa.