25 octubre, 2006

De Lo Poco Que Cierta Gente Se Aleja de +/- Una Desviación Standard del C.N.P. (O Sea, Del Cojudo Nacional Promedio)

En aquello que dio en llamar 'Enciclopedia de la Conducta Humana', el escritor peruano Luis Felipe Angell de Lama, 'Sofocleto', inicia el Volumen I ('Los Cojudos') con un pórtico que pinta de cuerpo entero la calidad de su estupenda obra: 'Dios hizo a los cojudos para que los demás peruanos no se murieran de hambre'.

En tal orden de cosas, y considerando que este Metrónomo-por cuestiones de la vida- ha revisado dicho primer volumen así como los posts más recientes del blog e-Pístolas a Noelia, el suscrito se permite transcribir algunas válidas consideraciones, con todo cariño para el responsable o responsables del mencionado blog:

"En el orden espiritual, el C.N.P. (Cojudo Nacional Promedio) de la categoría Romántico es el que escribe sonetos paticortos o versilargos, a medias con Chocano y dedicados a la primera novia, que murió de cojuda porque al incendiársele la falda se echó kerosene para apagar las llamas. Es de los que dialogan con la Luna, leen a Bécquer, suspiran al llegar la primavera, huelen jazmines como si fuera pichicata y tuercen los ojos hacia arriba cuando oyen algo de Chopin. Tengan la edad que tengan, siempre irán por la calle agarrados de la mano con alguien, sea la 'prometida' (que es como los cojudos llaman a su futura mujer), la esposa, la prima, la sobrina, la tía o un amigo de la infancia, en cuyo caso el tipo, además de cojudo, viene a ser homosexual."

Asi que, señores de las e-Pístolas, ya saben a qué atenerse.
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(*) En la foto, Johnny Alexander Rumiche Pujearteaga, elegido Mister Fotogenia en el XXVIº Conclave Nacional de Cojudos Peruanos, celebrado en la localidad de Carhuapoto, Huancavelica. Archivo de la Sección de Espectáculos & Variedades del Semanario del Arzobispado de Chala (Arequipa, Perú).

22 octubre, 2006

¡Qué Calor!, Con Subterráneo Ruido...


Llegó, felizmente, el remedio para los neblinosos y algo fríos días que ha vivido Lima en estas cuatro semanas desde que empezó la primavera. El pasado viernes, a las 5:45 a.m., frente a las costas de Chincha se hizo un recordaris de magnitud 6.4 de la escala de Richter a esta alzheimeriana temporada de primavera de que ya era hora de que comenzara a solear, a echar flores y a permitirnos cantar alegría, alegría de natura que canta / alegría, alegría de nuestra juventud, ¡ra, ra, ra! (digresión: como si Chincha no existiera, algunas cadenas informativas ubicaron el epicentro al suroeste de Cañete y otras al noroeste de Pisco, a resultas de lo cual hubo un ignominioso y cómplice silencio acerca de la Capital de la Cordialidad, que no sé por qué, ¡caracho!, no tiene derecho siquiera a tener epicentro propio… cosas de apristas, seguramente).

El comentario que recibí de una amiga, compañera de trabajo, al llegar a la oficina fue: “¡Claro, si ya tenía que haber un temblorcito, para que cambie el clima!”. Inquieto por tan monumental como perspicaz derroche de cultura climatológico-telúrica (la cual convocó el únanime y respetuoso murmullo de asentimiento de todos los otros compañeros que presenciaban la charla) inquietó profundamente mi modestísimo y poco cultivado cacumen. Esta tarde Googleé por un buen rato hasta arribar a las siguientes pasmosas comprobaciones, las cuales no sólo derribaron mi mentecato escepticismo, sino que corroboran al milímetro tan fenomenal aserto:

(a) En Japón ocurren cinco mil sismos cada año, es decir, unos catorce diarios de promedio. Tal, creo, es la explicación de que haya tantos japoneses (ciento treinta millones, nada menos): entre cambio y cambio de ropa, según cada variación en el clima (el lector sagaz inferirá que ello ocurre catorce veces durante el día), los ponjas aprovecharán más que seguro para uno o varios entusiastas rapiditos (en inglés, unos quickies). No sólo eso; sorprendentemente el modo de decir “” en japonés es “Hái”, palabra que se origina en un involuntario remedo de un estornudo, dicen los semiólogos, causados por la frecuencia agotadora de tanto cambio de temperatura. Tiens! ¡A’i tá!.

(b) En las costas del este de Norteamérica no ocurren terremotos. Se ha verificado (sotto voce) que el hacer aparecer a Nueva York con nieve en Navidad no es más que un elemento más de la enorme conspiración de los white anglosaxons protestants (wasps, que les dicen) a fin de hacer desistir al resto de los habitantes de este planeta que es bacán to live in America (ahora me explico mejor lo del muro con México). Asimismo, en las feraces pampas argentinas tampoco hay terremotos: por razones de tercermundismo y bajo presupuesto, sólo se hace caer lluvia sobre la pampa (¡Yyyyy!, no alcanzó pa´ la nieve, che, no alcanzó…); el artilugio -si bien eficaz, algo imperfecto- detuvo por largo tiempo las olas migratorias desencadenando, en consecuencia, el desarrollo autárquico del singular homo porteñus, cuyas características huelga aquí ampliar (¡eso les pasa por afincarse en la zona bonita, pues!).

Tras enterarme de todo esto, pienso en la futilidad de haber invertido tantos cientos de miles de dólares en estudios para el pronóstico de temblores (a más de las tantas entrevistas que le endilgan al pobre sismólogo Julio Kuroiwa -¡hai!- que, por cada temblorcito que supere el grado 3, tiene que dar una explicación acerca del Cinturón de Fuego del Pacífico y la pussy of the cat... como diría Augusto, al hacerlo debe estar más aburrido que El Gordo Casaretto contando un chiste de Pirula). Para la costa central peruana bastaría nomás -¡qué perogrullada!- echarle una miradita al calendario y marcar con rojo las fechas de ocurrencia de los equinoccios y solsticios (21 de Marzo, 22 de Junio, 23 de Setiembre, 22 de Diciembre). Voilà! Más seguro que el sexo seguro, al menos cuatro temblores por año, fully guaranteed.

Así que después no digan que no les advertí.

19 octubre, 2006

Dromedarios, Go Home!



Uno de los sultanes de Marruecos (la verdad es que desconozco si hay uno o más sultanes en esos lejanos reinos), a fin de poblar las dunas que circundan la ciudad de Ica, obsequió diez dromedarios a esa localidad, la cual -dicho sea de paso- se precia de tener la orilla de playa más ancha del mundo (¡casi 40 km!). Desde hace algunos días, el reducido livestock camélido ha ido disminuyendo de uno en uno, hecho que -como dicen los corresponsales de RPP cada vez que transmiten sus reportes matinales- viene ocasionando gran preocupación entre los vecinos. Como quiera que algún avispado lector podría a estas alturas estarse preguntando respecto de las diferencias entre un camello y un dromedario (aparte del número de sus jorobas, claro), debo explicar que los dromedarios son animales muy parecidos a los camellos; estrictamente hablando, caminan como camellos, comen como camellos, son estúpidos como camellos, tienen la proverbial sed de los camellos y -he aquí detalle revelador, o género distingüendo- ¡cagan como camellos!. Para terminar de saciar tales inquietudes, digo más: si uno mira desde una distancia de un kilómetro a un camello junto a un dromedario, las diferencias entre ambos animales son -¡agárrese Catalina!- exactamente las mismas que uno podría apreciar entre un guanaco y una llama macho vistos a la misma distancia (lector avispado, dése por satisfecho y diga que le fue bien, so riesgo de tener que soportar pormenorizada explicación acerca de por qué la estatua ecuestre de San Martín -colocada en una plaza del mismo nombre, en curiosa coincidencia- tiene una figura que representa a la Patria con un auquénido en la cabeza, una llama-animal, en vez de una de esas llamas a las que se dice votivas, tal como fue idea original del escultor).

Se han ensayado algunas hipótesis para explicar la tan súbita desaparición de dichos dromedarios, dos de las cuales pasan por fundarla en una severa intoxicación y la tercera es remitida a un plan de concepción algo más mística. La primera explicación consiste en decir que las vísceras hinchadas encontradas en los cuerpos se originaron en una sobredosis de chocotejas de la marca Helena -más precisamente, rellenas de manjarblanco y pecanas- las cuales los dromedarios ingirieron no sólo con el papel envoltorio, sino con bolsa de plástico negra de mercado, servilletas Karicia y dos o tres chisguetes de Kolynos más, los cual ocasionaron severas diarreas y una ulterior y letal deshidratación. Un segundo argumento señala que, tratándose del mes Morado, época de culto y veneración a la sagrada imagen del Señor de los Malogros -de los Milagros, perdón-, en vez de agua los dromedarios bebieron cachina iqueña, cuyos efectos post ingesta (y al respecto consulté con alguien que los padeció en organismo propio, mi buen amigo el Lic. Alfredo Delgado, que al margen de sus ciento dos kilos, toda su vida va a ser delgado) apuntan a que a uno primero se ponga morado, caiga de rodillas después y finalmente quede en condición de inconsciencia, listo para ser llevado en andas (sobre ello, las imágenes propaladas por los noticiarios no mintieron: la secuencia fue tal cual). La tercera explicación, de índole mas bien esotérica, está relacionada con el hecho de que algunos enemigos del Alcalde de la provincia, a fin de obstaculizar su reelección las elecciones municipales sentando que la gestión no ha sido exitosa ni siquiera en el rubro de cuidar una manada de camellos, hayan estado improvisando sesiones secretas de ritos vudú en las que, al ritmo de la conocida tonada infantil 'Yo Tenía Diez Perritos', reemplazaran en el estribillo la palabra perritos por la de dromedaritos, propinando así telepáticas maldiciones que hicieron que uno de los dromedarios cayera en la nieve (!), que otro se comiera un bizcocho, que otro se cortara con un machete, otro se fuera con Moisés, uno fuera al circo, uno al teatro, que a otro se lo pelara Andrés y que a los restantes, a uno le diera tos y al otro (en franco pánico) se mantuviera en asustado ayuno, de modo tal a hoy - 19.Oct.06- sólo queda viva la dromedaria 'Estrellita', la cual, según dicen es animal nacido en estos lares, y como tal, buen amancae peruvianis, sobreviva pese al hambre y la sed en el desierto inclemente que queda al sur de San Clemente (o sea, en Ica).

Como fuere, antecedente histórico del evento de esta desaparición de dromedarios sólo se encuentra en la súbita y trágica escasez de rinocerontes acaecida hace cosa de dos décadas en los pagos de la tribu de donde fue originario el mítico Yogurtu 'Ngué, tal como coplan Les Luthiers en su histórico álbum 'Cartas de Color'.

Seguiremos informando.

13 octubre, 2006

De Aviones

Estima'o Metrónomo: ¡Coño que e' difícil encontrarte por el teléfono, chaval!. Era p'avisarte que te estoy mandando una notita que ha hecho mi hermano er Curro, qu'e'tudia en la Facultá de Hacer Avione', acá en A Coruña, pa'l tablón'e notizia'. A ver si te e' de utilidá allá pa' que lo cuelgues en tu bló alguna vé, porque sé que tú anda' con to'o eso de la ciencia. Un abrazo, y te dejo porque sigo en lo de hace'me alguno' duro'. Afe'tuosamente, Manolo.

Gestores del Sueño de Volar: Newton, Bernouilli y García.

La explicación más sencilla acerca de cómo se produce el vuelo de un avión -ese heroico esfuerzo del hombre moderno para rebatir efímeramente la gravitación universal, cuyas leyes enunciara Isaac Newton- consiste en que el diseño del ala permite que el aire circule más rápido por su parte superior y más lento por la inferior, estableciendo una diferencia entre ambas presiones y suspendiendo así el avión entre dichas fuerzas; este descubrimiento fue gestado a partir del tratado matemático de Jakob Bernouilli, cuya principal verificación dictamina que, al aumentar la velocidad del aire circundante, la presión de éste disminuye.

La reciente y trágica caída de una avioneta sobre un edificio en Manhattan, por causas que se atribuyen fundamentalmente a factores meteorológicos, vuelve a poner sobre el tapete con vigorosa validez lo postulado por el Ingº Manuel García -mi padre-, fundador de la Escuela Gallega de Hacer Aviones. Sus postulados, relegados al indiferente y discriminador olvido que propiciaron algunos indoctos detractores, cobran más vigencia si se tiene en consideración la nula tasa de accidentes de aeronavegación verificados sobre Galicia.

Las investigaciones iniciales del Ingº García se remitieron a la observación de dos factores fundamentales, curiosamente ambos de origen acústico antes que de índole aerodinámica (ésta fue razón ulterior para el severo cuestionamiento a sus conclusiones). El primero está vinculado, se cuenta, con el rumor del viento que percibió durante muchas tardes de su niñez, la mayor parte de la cual transcurrió entre las comarcas de Quintana y Obradoiro. Se dice que al quedarse dormitando bajo un olivo cerca a la alquería familiar (negar el símil con un juvenil Newton bajo un célebre manzano sería pecar de falsa modestia), oía cómo el aire de la campiña entraba de modo atropellado en sus orejas, maravillándose con esa breve y silenciosa turbulencia, por lo que daba en voltear la cabeza una y otra vez a fin de permitir al viento dar de lleno en sus dos pabellones auditivos; este suceso lo marcó permanentemente, dejando en su persona esa especie de tic según el cual parecía decirle no a todo, ocasionándole no pocos malentendidos y granjeándole una infundada fama de pesimista. Lo segundo -crucial para el desarrollo de su monumental 'Vamo' A Volá...', publicado en entregas semanales por el diario 'El Ideal Gallego' entre 1935 y 1936 y que condujo a la construcción del prototipo Manolo I (al que llamó así en honor a su primogénito)- fue la constrastación de la evidencia física cuya liaison con la aeronáutica era largamente sospechada, la cual recoge la sabiduría popular en ciertas tonadas, especialmente en aquella que dice "Aires airiños, aires da miña terra / Aires, airiños, aires, airiños, levame a ella / Sin ella vivir non podo / Non podo, ay, vivir contento...". De todo ello -y el espacio aquí es mezquino para esclarecer con precisión técnica un pormenorizado alcance de sus sesudas investigaciones- bastará resaltar que el Ingº García coligió, inspiradamente, que eran los aires propios de nuestra Galicia los más indicados para efectuar vuelos y no los de otras latitudes (acaso lo fueren también los del área de Buenos Aires, Argentina, aunque ello no se ha verificado a la luz de esas investigaciones).

Acompaño foto del monumento recientemente develado frente al ayuntamiento de Obradoiro en honor a su hijo predilecto, el Ingº Manuel García, recordando los setenta años de la construcción del Manolo I, importante hito de la aeronáutica mundial.

12 octubre, 2006

Mejorando Los Presentes (MLP)

Este post es para evidenciar la estima que profeso para con un gran amigo y mejor compadre, quien en sus ratos de gourmet / gourmand (MLP) a veces se le da por pinchar pedazos de huachalomo de chanchito asado (MLP) con un tenedor y ofrecerlo directamente a la boca de sus amigos (esto lo hace porque se sienta en la noticia acerca de lo que pueden atribuirle las mentes pacatas que en todo ven mariconadas... por cierto, bien que algunos de sus amigos aceptan de buen grado el bocadillo). Hace algún tiempo conversamos acerca de un cartoon de Warner Brothers realmente inesquecivel del cual sólo habíamos rescatado la música y buscado infructuosamente en las compilaciones de caricaturas de esa compañía en Amazon y E-Bay, hasta que finalmente alguien piadoso lo ha colgado en la Biblioteca de Alejandría visual, o sea, el socorrido YouTube. Adjunto la letra completa, como es habitual, en el primer comment.

Con la genial dirección de Fritz Freleng, "Three Little Bops" (mejorando los presentes).

10 octubre, 2006

¡Vamo' Pa Zimbabwe, Familia!



El pasado 16 de Setiembre recibimos en la casilla de Gmail de Otro No una invitación para compartir un negocio que nos pareció interesante en grado sumo (la traducción completa del mensaje recibido se adosa como primer comentario a este post)

Para abreviar, se trata que el Presidente de Zimbabwe, Robert Mugabe, promulgó una nueva legislación agraria que desencadenó una extrema tensión social, empujando a que veteranos y mercenarios de otras guerras se constituyeran en piquetes de asesinos que ultimaron cientos de personas, entre las que se cuenta el padre de un afligido zimbabwano -el Sr. Paul Konta, suscriptor de la carta- quien, en días previos a su muerte, efectuó un depósito en un lugar seguro de diecinueve millones de dólares, los cuales estaban destinados a encomiables tareas de índole humanitaria. Habiéndonos contactado a través de una agencia sudafricana a fin de compartir generosamente tal monto (todo es preferible antes de que caiga en las manos de los zafios truhanes del corrupto régimen mugabiano), no sólo nos llenamos de orgullo por enterarnos que la difusión de Otro No alcanza hasta las soleadas y amables tierras africanas sino que -reconociéndonos practicantes a toda prueba de la solidaridad y el altruísmo- hemos puesto a disposición del Sr. Konta no solamente los números de las cuentas corrientes que maneja Otro No en la Swiss Investment & Finance Corp. (cuentas que abrimos en la sucursal del balneario del lago Locarno, para ir a tono con nuestro motto), sino que de modo inmediato hemos solicitado se emita también en su favor una tarjeta adicional de las completísimas tiendas Saga Falabella, por lo que se le pudiera ofrecer. Ponemos en autos de nuestros lectores, por acuerdo de nuestro directorio y en coordinación con el Lic. Manolo García -competente consultor y amigo, a quien acudimos con frecuencia tratándose de decisiones cruciales, como la que nos ocupa- que pretenderemos apenas el 79% de la cifra conversada (porcentaje que no es casual, toda vez que ha sido mencionado así como pa' quedar en 75%), lo cual redondearía en un aproximado de quince millones de dólares lo que será nuestro muy desprendido emolumento.

Seguros de que nuestros lectores contribuirán con más ideas para la aplicación y uso de tales fondos (los que seguramente y de modo pleno contaremos en un plazo muy breve), nos estamos dedicando a la evaluación de los siguientes proyectos:

+ Patrocinio del estudio 'Investigación Probabilística Combinada de La Rotación Aleatoria de Cinco Hexaedros en Receptáculo de Cuero de Vacuno (Cachito)', conducida por el Prof. Roberto Challe, de la Universidad DallaVita, Italia.
+ Patrocinio (alternativo a los ya subvencionados) del 'Club de Fans de Kim Jong Il' -también conocido por sus siglas de 'KJF&E'-, de reciente formación en Pionyang.
+ Donación no revolvente a la Sociedad Investigadora de la Inteligencia de A Coruña, en Galicia, España (la cual se nos ha pedido no sea en metálico, en precaución por la humedad).
+ Donación a la Sociedad Investigadora contra Fraudes por Internet, con sede en Harare, Zimbabwe.
+ Institución de la Beca de otorgamiento bianual denominada 'Charles Sí, Otro No', destinada a la motivación de los primeros puestos femeninos de los Centros No Estatales de Capacitación Profesional de Lima y provincias.
Quedamos a la espera de sus sugerencias al respecto.

03 octubre, 2006

Necesarias Gracias

Como dice Pelé cada vez que se mira al espejo: aclaremos esta situação...

Atendiendo a lo que divulgó en 1983 el gurú Cheo Feliciano en su conocida encíclica 'Trizas', "uno se entrega entero y lo devuelven en pedacitos (pa' tí negrona, ¡aaaaay!)", el deber de todo artista que se precie es prodigarse incondicionalmente a su público y, en virtud de ello, es casi un menester ser devuelto cortado en cuadritos como con un Nicer Dicer (cuchillas de diseño alemán de filo inagotable), triturado como con un Magic Bullet (¡una comida completa en tan sólo diez segundos!) o hecho una papilla por el incontrastable Jack Lalanne's Power Juicer (preservando intacto, no obstante, todo el contenido vitamínico). En eso consiste, básicamente, el dispendioso precio de la fama, I.G.V. incluido.
Lo sé de cierto y de modo muy cercano desde el día en que, en mi début sobre las tablas, despojándome de todo tapujo (además de la ropa, porque ya no entraba) puse sobre mi humanidad el sobrio disfraz fucsia del dinosaurio más querido de la televisión -me refiero al carismático Barney- en ocasión del cumpleaños número cinco de mi sobrina Carla María. Conocí de cerca el sabor de la fama desde el momento en que llegaba a la comisura de mis labios parte del profuso sudor actoral (ocasionado no tanto por miedo escénico, sino por el calor casi de pachamanca que generaba la impenetrable goma látex de la que estaba hecho el disfraz) hasta el feliz momento en que organicé la rondita de fin del programa con un habitual 'Te quiero yo y tú a mí, somos una familia feliz...', que esperaba terminar de una vez por todas con las jaladas de cola, las patadas a la canillas y los espabilados '¡Ya sé que eres mi tío Carlitos...!' que me prodigaban, felices, los veintitantos entusiastas e incansables chiquillos que bailaban de mi mano y alrededor.

Es por ello que al leer el muy meritorio perfil (escrito de costado) de la incondicional Normita Tinoco no he podido más que -tanto como en la ocasión descrita en el párrafo precedente- paladear el inigualable disfrute de la labor cumplida (o, mejor, en gerundio, de la labor cumpliéndose) en este humilde Metrónomo, sintiendo que mis modestas letras han llegado hasta los más distantes confines, no sólo de la patria, sino también de los intelectos, cualesquiera fuera el número de neuronas que los cobijen. Me place sobremanera enterarme que -aunque en la nota no hayan sido mencionados con nombre propio- mis poemas 'Erotema (O La Lengua Castellana Para Un Segundo Uso)' y 'La Tauromaquia De Tu Ausencia' fueron incidental fuente de inspiración para Normita et alter a fin de echar a rodar la traviesa locura en la que se ha convertido el 'Club de Fans Charles Forever & Ever', en sus palabras, 'faro origen de luz y de proyección de destinos', debiendo dejar totalmente en claro que estaría dispuesto a aceptar toda invitación a cualquier karaoke -ya en Lima, provincias o en el extranjero- para cantar toda serratiana 'Penélope' que se pudiera poner a tiro, con la feliz certeza de que al acabarla y -emulando a un consagrado ídolo del heavy- me pudiera lanzar de espaldas y con los brazos en cruz, dichoso y confiado, sobre un compacto mar de amigas y devotas metronomeras.

A fin de no quedar solamente en palabras, y dado que la remisión vía DHL viene resultando algo costosa para estos tiempos de escasez de rinocerontes, dejo una vez más en sus manos retrato del suscrito debidamente dedicado, parafraseando a Salinger, with love & squalor.


(Un pechón Metrónomo el día en que pensó que el mar se venía. Playa La Granja, Chincha, en el verano de 2006. Nótese la rúbrica del autor, incuestionablemente inspirada en el sello de Prince. )